Hoy quería escribir cualquier otra cosa. Pero no puedo.
Soy quien soy. Mi abuelo materno fue minero, entre otras muchas cosas que no caben en este triste escrito. Y mi padre, por unos años (de su infancia y adolescencia), también. Mi abuela materna nació en Santa Lucía de Gordón; porque su abuela era Pasiega, y desde aquellos valles vino a éstos a buscar el pan.
Yo ya nací más lejos de todo aquello, no en la distancia, sino en el sufrir. Pero no lo lo suficiente, como para que algo no me pinche muy dentro y duela, cuando mueren seis mineros. O uno.
Estas tierras de lobos, de santos y caciques; de inviernos largos y hielo que entra en el alma al respirar enero...De maquis, viudas de luto y sólo la compañía de la memoria que te cuenta ante el fuego cómplice, todo lo que nunca debímos olvidar. Tierras negras de carbón y tormentas, tierras "de paso", y tierras de todos y de nadie...
Estas tierras te marcan; y, en estos tiempos donde reina el individualismo, donde volvemos la mirada ante el sufrimiento ajeno; ante la explotación, ante el chantaje....a no ser que nos toque, y a veces ni aún así...simplemente, quería expresar mi más sincero pesar a todos los mineros y sus familias. Y rendir mi minúsculo y humilde homenaje a un colectivo que siempre ha estado unido. Muy unido. Por el dolor, y por la supervivencia.
Unión, fuerza, orgullo. Al margen de polítiqueos, filosofadas y otras retóricas, me rindo a su ejemplo, y me sumo a su sentir.
Querría tener un corazón de oro. Pero hoy (un hoy muy largo, ya) lo tengo negro, de luto, y de carbón.
"He sido un minero
para encontrar un corazón de oro"
-Neil Young-
:(
ResponderEliminarQue bien lo has dicho, Moni, bien dicho porque está bien sentido. Un beso
Mucha pena tener que volver a sentir esto, una y otra vez; y parece que cada vez más. Nuestros abuelitos, Adra, se fueron creyendo tal vez que nosotras ya no volveríamos a sentirlo. Y ya ves. No digo más aquí porque soy impulsiva y me lleva la rabia a un terreno dónde no quiero ir. Sólo estar por momentos al lado del sentir de ellos. Poque no soy tan valiente como para estar siempre.
EliminarUn beso muy grande Adra Sólo :)
Estoy contigo, aunque no sea de ahí, ni mi familia haya sufrido la mina.
ResponderEliminarGracias Mª Jesús; claro que sí.
EliminarA veces tratas de olvidar lo malo de lo que te cuentan, pero vuelve.
Un abrazo enorme :)
Que hermoso corazón. Te abrazo, Moni.
ResponderEliminarAyy, gracias Darío, otro abrazo para tí.
EliminarA ver si la melancolía otoñal deja paso a cosas más alegres :) Que vaya mesecito...
Se ve chulo el blog :D Sobre todo en mi ordenador que se ve cuando lo pinchas y no una hora menos en Canarias :P
ResponderEliminarBeso
Ostras, ja ja, me parto...sí que voy a tener que actualizarme...
EliminarMuchas gracias, muchaaas, Adra....toy muuuy contenta de haberte visto y de que me lo hayas arreglado ...
Muchos besos!!