miércoles, 4 de diciembre de 2019

GRETA Y LA MÚSICA






El otro día por la tarde, a una hora no muy prudente, se me escapó Greta, la cabra que me dejó al cuidado mi amigo Pablo, uno de cerca de Acebedo. Las pasé canutas para pillarla; de hecho, yo no la pillé. Si ya de por mi tengo una imagen un tanto peculiar, me temo que este acontecimiento ha sido decisivo para acabar de fastidiarla. 
Le puso Greta en honor a Greta Garbo, no vayáis a pensar otra cosa. Porque dice Pablo que se le parece mucho en eso que decía la Garbo de que "no es que quiera estar sola, sino que la dejen en paz".
Yo no hice nada...sólo se me ocurrió poner música en el equipo, en el bueno; a Humo-mi perro Carea-  le encanta. Y como Humo no parecía muy convencido de que Greta se quedara en casa, la puse para calmarle; y él se calmó, efectivamente. Bueno, lo que entiende Humo por calma: saltar y brincar, morderme las mangas de la chaqueta, dar carreras por todo el salón hasta que me yo me agoto y se queda echado frente de los altavoces, los mira y mueve las orejas con cada cambio de ritmo, y sobre todo con el saxo.
Pero Greta, de repente, salió de estampida, como horrorizada, yo quise cogerla pero era imposible. Pensé en ponerle la correa para sacarla de paseo y en esas estaba, cuando al abrir la puerta para tratar de engatusarla y que viniera, me dio un trompazo y salió corriendo a la escalera. A partir de ahí fue todo mucho más terrible...Coincidió que unos vecinos subían por las escaleras, Greta les esquivó de un empujón y bufando, salió a la calle. Siempre coincide que haya gente por las escaleras. Hay gente a todas horas por todas partes, haciendo de todo, cualquier cosa, no importa qué. También coincidió que estaba la calle llena de gente, claro; Greta saltó encima de varios coches, casualmente los de los vecinos más sensibles a este tipo de  acontecimientos. Volvió a bajar y empezó a embestir a una papelera, mirándome a veces, haciéndome muecas raras. Echó a correr de nuevo, se paró en seco un momento a oler unos papeles de publicidad que había tirados por el suelo. Eso también coincide siempre, es decir, los papeles tirados por el suelo. No llegué a tiempo; cogió uno en la boca y marchó corriendo con esas pintas como una loca por la acera arriba, giró en la esquina, y me dio un vuelco el corazón. Corrí como en mi vida, yo ya no estoy para estos trotes, pensaba, casi ahogada...pero sí: si que estoy, por lo visto. Corrí y corrí hasta que la vi de lejos en el parque, dónde  coincide que estaba llenos de niños; claro. En ese momento me vi en la cárcel. Como algo parecido a la magia, se calmó y empezó a jugar con los niños, mientras sus padres chillaban histéricos desde las ventanas. Aproveché para "cazarla", pero no quería venir, la muy testaruda. Quería quedarse con los niños. A todo esto, ya había llegado la policía y me empezó a preguntar cosas...no recuerdo bien, cosas que me parecieron extrañas: que si de quién es la cabra, que si tengo permiso de cabrera, que si por qué no lleva bozal, que si que cabra más bonita decía uno....Acabé mareándome.
No recuerdo más; sólo que me desperté sentada en el suelo con mi chico al lado -alguien le había llamado-  mirándome con mucha compasión y con Greta cogida con la correa y muy quieta y satisfecha, mirándome desde arriba. . La policía charlaba muy entretenida con él, "...menos mal, jejeje, si no pasa nada, mujer...que linda cabritilla, fíjate, si parece un perrito...". Los niños me rodeaban y me ofrecían agua y caramelos. Los padres se arremolinaban un poco más allá y miraban con cara de mucha compasión, también, una compasión un poco distinta.
Ya entrada bien la noche llegó Pablo. Por fin. Cenó con nosotros y le contamos más o menos lo que pasó; no le dio ninguna importancia, sólo comía tranquilo, y divertido. Mi chico igual; con algún matiz entre el sarcasmo y un profundo amor que pasa inadvertido al resto del mundo.
Humo y la cabra se han hecho inseparables. Cada vez que vamos por allí, por cerca de Acebedo, a ver a Pablo, Greta sale corriendo a recibir a Humo que se pone como loco, brinca y salta como un canguro poseso, luego corren juntos entre los robles, ladera arriba y abajo, o entre los caballos ocres que pastan en la colina. De vez en cuando la cabritilla se acerca y me lame una mano, como si fuera un perro. 
De vez en cuando, también, algún vecino -los sensibles a estos acontecimientos, no-  me pregunta por la cabra. Que a ver si la traigo, que si que maja, que si qué hace falta para tener una...He hecho más amigos gracias a la putada de la cabra Greta que en años, algo que por otra parte, no es que fuera mucho mi  intención, la verdad. 
Y ahora que está llegando la dulce Navidad, me estoy pensando muy seriamente traer a Greta unos días con nosotros. Pablo está de acuerdo, mi chico también, y Humo deseándolo.  A las cenas, a las comidas, y a todas las reuniones que hagan falta; y poner la misma canción que sonaba cuando se me escapó. Porque eso sí, tengo muy buena memoria para la música.





25 comentarios:

  1. Jeje! Vaya historia! La foto de Greta es preciosa con esa pose y el buen desenfoque del fondo y para rematar la guitarra de Joe Walsh...
    Un abrazo Moni

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    1. :D me alegra que te haya gustado, amigo Fernando, muchas gracias. Abrazo grande.

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  2. Jajajaja. Tu has puesto letra y yo las imágenes, de cine. Me he reído y me imagino lo canutas que las habrás pasado. Si hacía algo o le pasa a algo ella, no se qué habría sido peor. ¡Vaya con la cuidadora! Muchas días como estos hacían falta así para amenizar las mañanas y tardes invernales. Ni inventada la historia te sale mejor que la realidad. Otra buena historia para guardar en el baúl de los recuerdos gratos.😘😘😘

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    1. Jjejeje...si te he echo reír...ya es todo. Muchas gracias, Katy, un besazo inmenso.

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  3. Has pasado toda una aventura, con la cabra. viendo como posa en la foto, creo que le va el nombre de maravilla. Lo que me ha dejado intrigada es la música que pusistes.

    Besos

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    1. Sonaba la canción del post...se ve que le gusta más el flamenco, a Greta, jeje. Muchas gracias, Antonia, un beso enorme.

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  4. Vaya con Greta la que te pudo liar. Y de paso te ha dejado una anecdota de esas que si intentas inventarla ni por asomo te sale.
    Es tan divina como Greta. Fotón Moni.
    Buena noche.
    Un abrazo.

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    1. Pues sí...la lio bien, jeje. Gracias Laura, un besazo guapa:)

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  5. Bellisimo trabajo, Moni... Con respecto a la foto has captado un instante que es una delicia
    Un abrazo

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    1. Muchísimas gracias, amigo...viniendo de ti, es un lujo para mí...Un abrazo grande:)

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  6. ·.
    A mi me pasa como a Greta, la Garbo, solo quiero que me dejen en paz.
    Me ha divertido tu impecable relato, que mantiene la atención hasta el final, que será fantástico si no se os ocurre por la cabra al horno, que es Navidad.
    Buen, tampoco me importaría tener una cabra así, de guapa, que le has sacado una foto de calendario de actrices.
    Por lo demás, ¡que buena es la policía de ese lugar!. Igual te has tirado al suelo para evitar la multa por llevar una cabra no identificada.
    Sigo sonriendo, y pensando que la foto es magnífica.
    Un beso

    LMA · & · CR

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    1. Con hacerte sonreír está todo hecho, Alfonso. Me alegro mucho:) Besos!!

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  7. Me entran unas ganas de comportarme como Greta, salir corriendo, espantar a la gente...y que me pongan de fondo música de saxo.
    La foto y la cabra son cameladoras.
    Besos.

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  8. Un relato realmente interesante y bonito, me ha gustado mucho,saludos y feliz semana.

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  9. Mi admiración por la magia de tus ojos cuando sacas la foto

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  10. Jajaja, Moni, menuda relato te has marcado...
    Muy de la manera de como tú cuentas las cosas.
    Simplemente genial.
    Una Greta peleona y divertida, un poco rebelde y amorosa al mismo tiempo.
    Una cabra estupenda a juzgar por la bella fotografía que nos muestras.
    Tan solo me queda aplaudirte con todas mis ganas.

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    1. Muchas gracias, Maripaz...me gusta verte reír también..Un besazo enorme!

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  11. Jajajaja ay Moni, me parto.. Vamos, el dueño se queda sin cabra porque esta que está aquí hace como que no conoce a la cabra ni la ha visto en su vida jajaja. Muy divertido el relato. Besos.

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    1. Tenía que haber hecho algo así, jejje, Gracias, Vero. Un besazo!!

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  12. Déjame a Greta a mí para nochebuena, please

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    1. Te dejo lo que sea menos una cabra en Nochebuena. :D
      Además...Greta es del Barca :D
      Un besazo, reina chula. Muy grande;)

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